ITV: Se avecinan tiempos de cambio. A partir de 2018 las pruebas realizadas contarán con un examen más severo.
Antecedentes:
En la ITV, tras ver 16 modelos homologados entre 2015 y 2016 superando los límites europeos de NOX, parece que las emisiones comenzarán por fin a tomarse en serio.
Se pondrán más estrictas al demostrar que los procesos de homologación han mostrado debilidades actualmente (en Sept arranca el ciclo WLPT). También las ITV controlarán que las emisiones de los coches no se disparen.
Actualidad:
Los expertos del CITA indican que las inspecciones apenas miden la opacidad del humo en los diésel. Esto “no permite un control exhaustivo de los vehículos Euro 5 y Euro 6”.
Aunque el diéselgate de VW ha sido el acelerador de este proceso, la idea viene de cuando se publicó la directiva 2014/45/UE. Ahora han de incorporar esas recomendaciones a la legislación (se espera un Real Decreto antes del verano). Finalmente está por ver cómo se integra el control de las emisiones NOX, que son las más nocivas.
¿Cómo se va a proceder?:
Comenzarán controlando si se han vaciado los filtros de partículas o manipulado las EGR. El objetivo es eliminar a los grandes contaminadores. Se están realizando pruebas para que, a finales de este año, contemos con un manual sobre los límites máximos de NOx. También se facilitarán procedimientos para comprobar que no se han manipulado los dispositivos anticontaminación.
Se incorporarán a las ITV medios e información electrónica para comprobar estos sistemas de diagnóstico a bordo. Posiblemente el acceso a esos datos encarecerá las tasas de la ITV.